Fuente: www.immedicohospitalario.es
La combinación con letrozol y abemaciclib no es similar a la quimioterapia estándar en la respuesta patológica [tasa de RCB (residual cancer burden) 0-I], cuando se administra como tratamiento neoadyuvante (antes de la cirugía) en pacientes con cáncer de mama que expresa receptores hormonales (RH+) y es negativo para HER2 (HER2-), en estadios II-III y con una elevada proliferación celular (de crecimiento celular rápido) según el índice Ki67 (de al menos el 20%), según los resultados del estudio CARABELA (GEICAM/2019-01) del Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama, presentados en el congreso anual de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO, por sus siglas en inglés) para el cáncer de mama (ESMO Breast Cancer 2024), celebrado en Berlín, del 15 al 17 de mayo.
Este ensayo clínico de fase II buscaba evaluar si un tratamiento previo a la cirugía de 12 meses de duración con letrozol (inhibidor de la aromatasa) y abemaciclib (inhibidor de la quinasa dependiente de las ciclinas 4 y 6, CDK4/6 por sus siglas en inglés) podría ser tan efectivo como la quimioterapia estándar con antraciclinas y taxanos durante 6 meses, en términos de respuesta patológica (tasa de RCB 0-I), en pacientes con este tipo de tumores luminales (con expresión de receptores hormonales), con alto riesgo de recaída. Actualmente, en pacientes con cáncer de mama RH+/HER2-, con afectación ganglionar y otros factores de alto riesgo de recaída, la combinación de abemaciclib y hormonoterapia se utiliza como tratamiento adyuvante (después de la cirugía), y generalmente tras quimioterapia. El objetivo principal del estudio CARABELA (GEICAM/2019-01), por tanto, era evaluar si el basar el tratamiento únicamente en hormonoterapia más abemaciclib, sin quimioterapia, podría ser una opción para las pacientes con este tipo de cáncer de mama. Sin embargo, este tratamiento no ha mostrado una respuesta patológica similar a la de la quimioterapia, en términos de la tasa de carga tumoral residual (RCB) 0-I.
Para el presidente de GEICAM y uno de los investigadores del estudio CARABELA (GEICAM/2019-01), el Profesor Miguel Martín, de los resultados puede concluirse que “en los tumores luminales HER2- y altamente proliferativos, de momento se debe pensar que, en general, la quimioterapia es un tratamiento necesario, probablemente además de hormonoterapia y abemaciclib, en las pacientes de riesgo definido por el estudio monarchE (que evalúa el efecto de esta combinación, hormonoterapia y abemaciclib, en pacientes con cáncer de mama RH+/HER2-, con afectación ganglionar, en estadios tempranos y con alto riesgo de recaída)”. Esta conclusión no es aplicable a los tumores luminales menos proliferativos, que no fueron incluidos en el estudio, aclara el presidente de GEICAM.
Seguimiento para evaluar la supervivencia libre de enfermedad
Uno de los objetivos secundarios del estudio CARABELA (GEICAM/2019-01) es el seguimiento a largo plazo de estas pacientes para determinar la supervivencia libre de enfermedad. “Al contrario de lo que sucede en otros tipos de cáncer de mama, en el luminal, la respuesta al tratamiento previo a la cirugía no es tan determinante del riesgo de recaída. Por tanto, va a ser muy importante ver cómo evolucionan estas pacientes, para conocer realmente el impacto de la respuesta patológica, y correlacionarlo con biomarcadores como la supresión del ciclo celular (equivalente a un valor de Ki67